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ESCUELAS VIVAS

Es una experiencia que es parte de la Comunidad de Aprendizaje, es lo mismo, no es una cosa diferente. Escuela Viva, a quien la escucha por primera vez ¿Cómo lo oyen? ¿A qué te suena?

Una de las cosas que pasan en la Escuela Viva es que, aunque no sepas que algo te gusta puedes aprenderlo. La compartición es importante, es una vuelta de la palabra para ver cómo nos fue a unos y a otros. Por ejemplo, alguien va a la acequia y otra persona en apicultura, entonces está viendo algo que tú no ves, pero te lo va a compartir.

La Escuela Viva es caminar y hacer junt@s, es una forma de mirar otras cosas, irnos sensibilizando, a ver a los animales, o ver dónde hay presencia de humedades, ver donde hay trabajo humano.

La Escuela Viva está basada en intercambio de saberes, se hace un intercambio de lo que sabemos todas y todos. L@s expertos en esta tierra son tú y tú, son los expertos de este lugar. Venimos a hacer el intercambio con lo que cada quién sabe. Eso no es muy común en las escuelas, donde llegas y te sientas. Nos tiene aquí que las escuelas no sirven, ¿de qué están sirviendo? Tanto esfuerzo de las familias, ¿están volviendo las chavas y chavos que se van a estudiar? ¿Están aprendiendo lo que hace falta? Esa escuela no está ayudando a los problemas reales como nuestra comida y con nuestra propia historia. Aquí estamos haciendo escuelas conscientes, de campo y de vida.

Ya están caminando las experiencias de escuela viva. Aquí es para venir a platicar cómo les está yendo y poder expandir para que otros se enteren de qué está pasando, y eso siga nutriendo la esperanza a través de las acciones, acá se dijo de esperanza no vivimos, de esperanza acción sí.

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La Escuela Viva son las patitas con las que camina la comunidad de aprendizaje. Cultivar monte, hacer correr el agua con la acequia, las abejas, las curvas de nivel, si no todas podemos ir a caminar a las Escuelas Vivas, podemos caminar con el relato y así todas y todos podemos estar.

¿Por qué le llamamos Escuela Viva? Porque habemos puros vivos aquí, de estos espacios se saca precisamente vida, los conocimientos que nos pueden dar vida. La gente que tiene conocimientos tiene vida. Es escuela porque se vive, porque uno vive la experiencia.

No es lo mismo que nos platiquen un día, a venir a hacerlo.

Eso es la experiencia viva que tiene uno y que ve que sí funciona. Es lo que hacemos...

ESCUELA VIVA EN LA COLMENA

ESCUELA VIVA EN LA ACEQUIA

ESCUELA VIVA EN LA MILPA

Así está siendo la ESCUELA VIVA. Distinguimos 6 momentos

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Vamos a ir juntas y juntos a esto. Hasta ahora lo que hemos entendido es que en la escuela viva, antes de caminar se planea, se piensa y se planea mejor en colectivo. Uno de los momentos importantes en la Escuela Viva, tiene que ver con la planeación, queremos que nos salga, queremos tener más posibilidad de lograr lo que estamos buscando, de lo contrario vamos a estar patinando. No se trata de hacer chamba por hacerla, a veces hacemos chambas que no nos quedan bien porque no las pensamos. Hay cosas que son de un solo tajo, pero hay cosas que requieren muchos pasos. A veces nos quedamos con un primer paso de un trabajo que implica varios pasos y nos desanimamos cuando no se terminan las cosas, por eso hablo de la planeación. Dibujamos unos monitos pensando en la cabecita.

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Segundo es caminar físicamente juntas a un lugar. Observar el territorio, observar de manera distinta, ir hacia lo que te da más curiosidad. Pasa cuando alguien visita tu territorio te das más cuenta, como que abres los ojos. El segundo momento de la escuela viva es caminar con los ojos abiertos juntas y juntos, no llegamos directamente a la faena, primero caminamos para poder enterarse un poco de qué va la cosa, dónde estás caminando, dónde estás colaborando. Si lo representáramos con un dibujito pondríamos un sol, porque el sol da inicio a todo, un ojo, un sol, un pie, un cimiento y un oído.

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El tercer momento de la escuela viva es trabajar, echarle montón, echarle faena, la hora de chambear, palita en mano, llevarte material, llevar tu sombrerito, tus botas para trabajar, y no andar ahí de chiqueona. Por ejemplo, con Don Chuchin la gente se repartió:
quien iba a usar el teodolito y quienes querían aprender a usar curvas de nivel, pues se tenían que pegar a Don Chava. Pero quiénes iban a sacar paxtle y treparse a los mezquites, nos pegamos con Lucha que de repente estaba hasta allá arriba y era la maestra de la poda. ¿Cuál es el símbolo de trabajar, de fanear? herramientas, una pala, machete, manos, una carretilla. Una cara feliz de trabajo, con sudor, un sombrero y una botella de agua.

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El cuarto momento, además de echar un taco y convivir, un momento bien importante de la escuela viva es contar lo que paso. No es pérdida de tiempo. ¿Por qué es importante contar cómo nos fue ese día? Nos acomodamos en círculo y platicamos de lo que sentimos al andar trabajando, contamos de lo que se vivió y lo que pasó. Ese momento de circulito tiene chiste porqué ahí escuchamos historias que nos recuerdan a las nuestras, como cuando era niña veía que los señores se juntaban para hacer bordos. Porque el trabajo es muy importante y también platicar cómo estamos, cómo está haciendo ese trabajo y las historias del lugar donde estamos visitando, que de otra forma no podríamos conocer. Expresar cómo nos estamos sintiendo y escuchar el testimonio para poder seguir dándonos continuidad.

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En el quinto momento sabemos que hay que contarles a otras personas que no fueron, dibujarlo, mapearlo, hacer los mapas de esperanza, de esperanza-acción.

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Y en el sexto momento vemos que es bien importante que después nos cuenten qué ha pasado ahí donde fuimos a hacer una Escuela Viva, ver la tarea que se quedó. ¿Y ahora qué ha sucedido por ahí? En espera a reunirnos y ver si se han cosechado frutos. Porque con un día de faena, queda nada más empezado.

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